El título podría perfectamente aparecer con letras grandes y de oro macizo en el frontispicio de los bancos españoles. Lo he dicho en ese blog en alguna ocasión pero déjenme que lo repita. Mi amigo Antxon solía decir que "el oficio de banquero es el más fácil del mundo. Coges el dinero al dos por siento, lo prestas al cuatro y con ese dos por siento vas tirando".
Esto viene a cuento porque los tigres de la banca española, léase, Santander, BBVA, la Caixa, Sabadell, Bankinter y UNICAJA, han batido el año 2.024 todos los récords establecidos y se han puesto literalmente morados de ganar pasta gansa a paladas (31.768 millones de €) como consecuencia de la genial y elaborada estrategia de dejarse llevar por la ola del mandato del Banco Central Europeo, el BCE, sobre el coste del dinero.
Y así en el primer semestre del año como el Euribor estaba caro se forraron con las hipotecas de coste variable y en el segundo como el BCE bajó el pistón, los clientes acudieron a los bancos en demanda de créditos y vuelta del burro a la era o sea, dos de la vela, de la vela dos. Siguen aplicando la sofisticada fórmula que apuntaba Antxon y se sigue forrando, de ahí lo del título de este escrito.
Hay que reconocer que no hay dinero en el mundo para pagar la sabiduría de los gestores bancarios que lleva a los mismos a seguir ganando cada vez más dinero aplicando las directrices emanadas del BCE.
Pese a los suculentos beneficios obtenidos, los lumbreras bancarios siguen protestando por la subida de impuestos aplicada por el malvado Gobierno Central por aquello de que "pide, llora, que algo queda".
No se quien fue el autor de la frase de, "si hay algo peor que atracar un banco es fundarlo". Chapeau por él.
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