sábado, 23 de agosto de 2014

SISTEMAS DE GESTIÓN

Se dice que el general Franco tenía dos bandejas en su mesa de despacho del Pardo. Una contenía las carpetas de los problemas de España que el tiempo había solucionado sin hacer nada por su parte. La otra los que el tiempo solucionaría siguiendo el mismo método. Felipe González, a la voz de "siempre que llueve escampa" imitaba al dictador en su particular sistema. Rajoy más de lo mismo haciendo de la pasividad su consigna. Su "resiste Luis", refiriéndose al ex tesorero Bárcena, pone de manifiesto su cada vez menos original forma de gestionar los problemas. Aquí en nuestra Comunidad hemos llevado el sistema descrito a la sublimación, puesto que simplemente no decimos nada. A finales de enero pasado la Consejera de Industria y otras cosas del Gobierno Vasco, apretada por la oposición manifestó que tenía dos ofertas, dos, para arreglar el desaguisado, tasado en 60 millones de euros, que los fallidos proyectos del Hiriko y del Fórmula uno habían causado en nuestra arcas. Siete meses después un espeso manto de silencio a venido a cubrir el asunto, lo que supone una encomiable mejora sobre el procedimiento más arriba citado. En la búsqueda de la excelencia, como corresponde a su departamento, hay que reconocer a la Consejera su mérito.

Rafael Hidalgo Segurola

martes, 12 de agosto de 2014


EL ESCORPIÓN Y LA RANA

A Esopo. que no daba puntada sin hilo, se le atribuye hace ya 2.600 años, la fábula siguiente. "Teniendo necesidad un escorpión de cruzar un río, no sabiendo nadar, pidió a una rana que lo transportara sobre su lomo. La rana,desconfiando tanto de la mala fama del escorpión como del poder de su veneno, se negó aduciendo que era capaz de inocularle el veneno en mitad de la travesía. Pero tonta, le contestó el escorpión, si así lo hiciera moriríamos los dos. A mitad de la misma el escorpión le inoculó su veneno. La rana antes de morir le dijo al escorpión, pero ¿como has sido capaz de hacer esto?. Eso está en mi condición, le contestó el escorpión antes de ahogarse".
En muchas ocasiones no entendemos el comportamiento del ser humano cuando realiza acciones fuera de toda lógica y ética. Guerras, asesinatos, corrupción, atentados contra la naturaleza, ambición desmedida y un largo etcétera de acciones infamantes. Esta fábula nos ayudará a entender nuestro comportamiento en el sentido de que al igual que le contestó el escorpión a la rana, la razón de todas estas acciones y por supuesto las buenas que también realizamos, está en nuestra condición humana.

jueves, 7 de agosto de 2014

UN HONORABLE MENOS


 Si ya no podemos fiarnos tan siquiera  de los "muy honorables", ¿que
nos queda?. Que al final, toda esta trama de corrupción  que había
urdido durante un montón de años en Cataluña ese impresentable e
innombrable sujeto, haya sido desvelada por una dama despechada no
deja de ser digno final de un culebrón.
  Todo ese tragar de cientos  y cientos  de empresarios que entraron
en el juego de las mordidas durante tanto tiempo es todo un símbolo de
la degradación de esta sociedad que ha hecho del dinero su santo y
seña. No estamos hablando de cifras simbólicas, insignificantes frente
a las que maneja en sus presupuestos una autonomía como la catalana,
no. Se está hablando hasta el momento, y este asunto no ha hecho sino
comenzar a mostrarse, siendo por tanto solo la parte visible del
iceberge, de una cantidad defraudada, robada en forma de
encarecimiento de las obras adjudicadas por la Generalitat, del orden
del 137 millones de euros. Si estuviéramos en un país serio, que no es
el caso, se deberían vaciar todas las cuentas del sujeto al que nos
referimos así como la de  los familiares de la mafiosa saga a la que
pertenece e ingresar su importe como un atípico en los presupuestos de
la autonomía catalana de los próximos años. Esa acción sería la manera
de restituir materialmente a esa sociedad lo que se le ha venido
robando durante tantos años. En lo que se refiere al otro tipo de
restitución, la moral, me temo que ha pasado ya demasiada agua bajo
los puentes como para que tal cosa sea posible. 
CATALUÑA Y LA LEY DEL SILENCIO

 Más de 30 años ininterrumpidos en el poder por parte de un partido político dan para mucho, y el robo institucional acaecido en Cataluña da buena fe de ello. Durante ese largo período de tiempo se ha construido, bajo una ley del silencio, un tupido entramado que ha calado en todos los estamentos de la sociedad catalana ya que no ha habido un espacio, bien sea político, económico, mediático, eclesial, judicial, cultural, deportivo... donde la alargada sombra del poder no haya interesadamente llegado, creando así un espeso vasallaje y pesebreo, caldo de cultivo imprescindible para facilitar el vaciamiento doloso de las arcas de esa autonomía por parte de su principal figura. Ya decía Orwell, hablando por cierto de esa autonomía que “ los nacionalismos no solo no condenan las malas artes realizadas por su bando, sino que tienen una increíble capacidad para ni siquiera oír hablar de ellas”.En definitiva este lamentable suceso ocurrido en Cataluña no es una excepción. Es una regla. De modo que sus efectos se repetirán, en cualquier lugar y de esa manera o parecida, si las condiciones creadas son las mismas que las citadas. Al fin y al cabo este lamentable episodio no deja de ser una consecuencia de la condición humana.