15,50 %.

Una encuesta de la Universidad de Deusto hace un dibujo político del País Vasco muy parecido al que dos semanas antes había realizado el Gobierno local. En ella, a la hora de valorar las instituciones, dejan a los partidos políticos, a la Iglesia y a la Monarquía como farolillos rojos de la clasificación de los favoritos del público soberano. Que la Monarquía ocupe el último lugar de la clasificación no supone ninguna sorpresa máxime tras los episodios encadenados por el progenitor del actual monarca (a los que hay que sumar los tenidos por su saga) y en lo que concierne a la Iglesia por la deriva tenida desde hace ya muchos años, tampoco. Pero bueno, al fin y al cabo sus nombramientos no han dependido de nosotros, motivo por el cual no deberíamos sentirnos responsables de sus poco afortunadas actuaciones. Lo que se debe dolernos y mucho es que los representantes elegidos por el pueblo, den la espalda a este y hagan de su capa un sayo, (como por ejemplo la actitud de los partidos independentistas), al ignorar olímpicamente datos tan contundentes como que solo el 15,5 % de los vascos esté a favor de la independencia del país y ellos sigan gastando tiempo y munición en intentar llevar adelante ese objetivo, que a la vista está, va contra natura. Esta actitud viene a corroborar que la clase política, esta y el resto de ellas, solo se representan a sí mismas a la voz de " tu ponme con tu voto en el poder que a partir de estar en él haré lo que convenga a mis intereses tanto idearios como crematísticos".

El resultado de las encuestas acerca de cuántas personas están a favor de la independencia política es, como decía, esclarecedor, lo cual no obsta para que los partidos independentistas sigan insistiendo en tal empeño, obviando la verdad objetiva de la encuesta, de esas y de otras que arrojaban resultados similares.

Entonces, ¿qué razones pueden impulsar a esos partidos para actuar de espaldas a la realidad?. A las ya apuntadas más arriba había que sumar. 1), Que están ciegos, aunque esto es altamente improbable. 2). Que esta cuestión de la independencia política no se la creen ni ellos, pero existen razones ocultas que les llevan a hacer que la ciudadanía se dedique más a creer que a pensar para  lo cual hay que alimentar de ilusiones inalcanzables a sus correligionarios - sus votantes - a base de argumentos de sal gorda. 3). La posición que tienen de partidos bisagras - situación de privilegio - para sostener a los sucesivos gobiernos centrales, hace que la capitalicen con continuos cambios de cromos o dicho de manera más coloquial, que utilicen la "táctica del salchichón" en la que sobre todo el PNV ha desarrollado técnicas de auténtico virtuosismo, con el resultado de aparecer ante la opinión pública - o parte de ella - como auténticos adalides de la Patria. 4). La erótica del poder sumada a la seguridad de un puesto de trabajo bien remunerado.

Ni la inamovible Constitución de España, ni la Unión Europea y con menos fuerza (ya lo estamos viendo) la opinión de la ciudadanía, harán que cejen en su empeño aparente de conseguir la independencia ya que han hecho del mismo su razón de vida.

HABLAR POR NO CALLAR

Los indultos a los políticos catalanes que ¿proclamaron? la República catalana están - si no están ya -  a punto de ser indultados y dos de ellos han realizado declaraciones que sin duda tenían como destinatarios a sus "fans" en dosis de sal gorda, como por ejemplo que Cuixart reste valor al indulto manifestando que el Gobierno la realiza ya que sino el tribunal de Estrasburgo les dará la razón. Tampoco se queda corto Junqueras cuando dice que el indulto es un triunfo de los indultados y que pone de manifiesto la debilidad de los aparatos del Estado. Si el Gobierno indulta buscando destensar la situación y establecer una relación de concordia las declaraciones de ambos políticos no coadyuvan a hacerlo.

Ambas declaraciones no hacen sino confirmar que los políticos viven en un mundo, en un universo paralelo con respecto al resto de los mortales ya que hay que tener muy desenfocado el punto de mira para obviar principios tan universales como "cuanto menos se dice, más se da la impresión de saber" o "habla poco  y finge dejar que su talento se exprese en su lugar" sin dejar a un lado el no menos cierto de que "hay un tiempo para hablar y otro para callar".

LA NAVAJA DE OCKHAM

Guillermo de Ockham fue un fraile franciscano y filósofo inglés (1.285 - 1.349) que dejó a lo largo de su vida una importante obra filosófica y teológica recogida en 17 tomos, de entre los cuales ha quedado hasta nuestros días presente el denominado principio de "la navaja de Ockham", también denominado con los variopintos nombres de principios de "parsimonia" o de "simplicidad" o de "economía". ¿Y porque se llama de la "navaja ?. Pues porque cortaba, dicen, las barbas del pensamiento, al respecto, del excesivamente elaborado del gran Platón. Este principio se puede resumir en que,

 

1 - Es fútil hacer algo con más cuándo puede realizarse con  

     menos (de ahí lo de economía).

2 - Cuando una proposición se hace cierta para dos hechos, 

     asumir un tercero es superfluo.

3 - En igualdad de condiciones las soluciones más sencillas 

     pueden ser también las más probables.

 

Se puede decir de manera simplificada que este principio está basado en el sentido común no debiendo plantear problemas para su aplicación, pero... los desacuerdos en su aplicación suelen surgir cuando se trata de definir los elementos más sencillos de una hipótesis ya que los hábitos del pensamiento humano así como las creencias suponen generalmente lo que una persona está dispuesta a considerar como sencillo o elemental.

Para una aplicación correcta de este principio es de obligado cumplimiento no multiplicar las causas, es decir las hipótesis de un razonamiento o lo que es lo mismo, razonar las premisas menos numerosas y más sencillas como más verosímiles. En decir, insistiendo en la idea de "cuando menos cosas se supongan mejor" y que las que queden sepan a fundamentales, eliminado las que siendo de "paja" puedan disturbar un análisis correcto.

Puede parecer a primera vista un sistema un tanto difícil para aplicarlo, pero lo curioso es que en nuestro quehacer diario lo estamos aplicando de manera intuitiva sin conocer la idea del fraile inglés constantemente. Así se hace en medicina cuando ante unos síntomas el especialista lejos de seguir la pista a un dilatado número de probables causas se centra en las dos o tres más probables a partir de las cuales realizará el seguimiento de la enfermedad. En la industria donde se está buscando - economía - siempre el método más simple. Nosotros mismos intuitivamente cuando vamos - por ejemplo - a visitar a alguien y resulta que no está, no pensamos que se ha marchado a América, o que le han ingresado en un hospital, o que se ha muerto sin avisar, o que le han metido en la cárcel... todo ello posible, pero no probable, (supuestos de "paja"), por lo que nos quedamos con un par de posibilidades, tales como habrá ido de compras o simplemente a darse una vuelta. En los estudios de estadística escogiendo para los mismos aquellos elementos que suenan a sustanciales. En procesos de calidad en la industria, en informática para escoger el camino más simple,  etc.

Todos esos procesos mentales son "navaja de Ocklham" en estado puro y la humanidad lo viene haciendo, consciente o inconscientemente, desde hace ya casi 700 años.

ACABÁRAMOS DE PARIR

El presidente de la patronal española, la CEOE, manifestó recientemente a la pregunta de un periodista que "defiende los indultos a los políticos catalanes si ello contribuye a que se normalice la situación de Cataluña, pues bienvenidos sean". 

Pero alguien o algunos le habrán tirado de las orejas hasta el punto de que se siente obligado a "matizar" (dichosas matizaciones que vienen a decir justamente lo contrario de su propuesta inicial) contestando a la pregunta de que "si entiende que los indultos podrían contribuir a la normalización política en Cataluña", con un "que no le corresponde contestar a esa pregunta porque soy presidente de la CEOE y no un político". 

Pues eso. Acabáramos de parir.

LOS 8 TIPOS DE INTELIGENCIA

Howard Gardner es un psicólogo norteamericano que cuenta con un gran predicamento entre los profesionales del sector y los del educadores y profesores merced a su teoría de "las inteligencias múltiples", en la cual define que "cada ser humano tiene una combinación única de inteligencia", lo que supone para el sistema educativo un desafío fundamental.

Esta clasificación se puede ver en el gráfico que más abajo se expone.

La teoría abre todo un desafío a profesores y educadores para centrar la búsqueda de unos modelos de enseñanza para las distintas clases de inteligencia, pero es que además debe suponer una gran ayuda para que los jóvenes intenten clasificarse en uno de los distintos grupos, cuestión que les será de gran utilidad - si esa es la vía que van a tomar - a la hora de elegir una carrera.

Curiosamente, Albert Einstein mucho antes de que incluso Gardner naciera, ya había anticipado al respecto que " todo el mundo es un genio, pero si juzgas a un pez por su capacidad de subir a un árbol pasará el resto de su vida creyendo que es idiota" que es lo que le pasará a alguien que estando encasillado en el tipo de inteligencia "matemática" le de por decantarse por la vía "musical".

Ahora, tras la prueba de Selectividad, este tipo de reflexiones pienso que pueden servir de ayuda para todos aquellos jóvenes que no solo deberían tener presente a la hora de elegir carrera la situación y tendencia del mercado de trabajo y su vocación, sino intentar auto- clasificarse en uno de los 8 tipos de inteligencia citados, cuestión que pienso se convertirá en fundamental para el resto de su vida.