LA NEGACIÓN COMO SISTEMA 19.1.2013
Toda la cúpula del PP sorprendida
incluso aparentemente indignada ante la noticia de las actuaciones de su
ex tesorero Bárcenas, que por supuesto ignoraban. Es lástima que ni
judios ni masones tengan peso actualmente en España, que los rojos hayan
literálmente desaparecido tras el tsunami del PSOE,( IU de momento
tiene poco peso) de modo que solo le queda al PP hacer referencia a los
nacionalistas para señalar el culpable de esta situación que en otros
tiempos, que sin duda añoran, lo tenían siempre claro. Eran los enemigos
de España, esa amalgana de conspiradores judeo-masónica-rojo
-separatistas, los que se hubieran encontrado tras estas desagradables y
torticeras noticias. No obstante tendrán que esforzarse en aclarar
algunas cosas, tales cómo el citado personaje tenía 22 millones de euros
en una cuenta suiza, cómo es que pese a estar desvinculado del partido
seguía teniendo despacho y archivo en la sede de Génova a la que acude
regularmente y cómo es que el que fuera secretario de Alianza Popular
Jorge Vestrynge manifieste que el reparto de sobres bajo cuerda para
redondear el salario de algunos notables del partido, era un sistema que
se venía empleando desde los tiempos en que Fraga era el factotum de AP
allá por los años 88. Sobres que de demostrarse finalmente su
existencia tendrán que explicar cual era la procedencia del dinero que
contenían y otras menudencias, tales como que tales ingresos por
supuesto no se declaraban como integrantes de sus salarios.Con ser esta
una noticia nefasta, no lo es menos el pensar que perfectamente pueda
ser una práctica extendida, sin excepción, en todos aquellos partidos
políticos españoles que hayan tenido capacidad de contratar obras y
servicios de forma importante. Estamos enfangados hasta más arriba de la
linea de flotación. Una muesca más para añadir a las numerosas que
coleccionan esta podrida clase política que lamentablemente nos
representa.Y un apunte final. Si no saben, que se vayan por ineptos y si
saben también, por corruptos.
R.Hidalgo Segurola
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