PRÓXIMA MOCIÓN DE CENSURA

La situación política de España que viene arrastrando mínimos desde hace ya tiempo ha alcanzado su cenit tras la sentencia del primero de los ocho juicios que se celebrarán como consecuencia de haber troceado todo el sumario en ocho piezas separadas dadas la complejidad y extensión de la trama Gurtel. 
A resultas del mismo se ha condenado a diversas penas de cárcel  a 29 personas del Partido Popular o próximas a el, cuyas condenas suman 351 años.
La sentencia, que consta de 1.687 páginas, ha considerado probado que el PP y la trama dirigida por Francisco Correa crearon " un auténtico y eficaz sistema de corrupción institucional por medio de mecanismos de manipulación de la contratación pública central, autonómica y local a través de una estrecha y continua relación con influyentes militantes del partido". Demoledor, pese a lo cual todavía destacados miembros del PP niegan la mayor, entre ellos el mismo Presidente, Mariano Rajoy, que manifiesta que todo ello no son mas que 10 o 15 casos aislados ocurridos además hace mucho tiempo. La definición del Tribunal en el sentido de que la trama era "un auténtico sistema de defraudación del erario público", no parece que va con ellos, tal es su desfachatez.
La sentencia recoge también los procedimientos que utilizaba la trama para robar al erario público. Por un lado inflaban los precios de las adjudicaciones que contrataban directamente, repartiéndose posteriormente la diferencia entre el precio real y el contratado. Recibían también comisiones de las empresas adjudicatarias aunque no fueran contratos directos con la Administración, regalos y servicios (viajes de lujo, pagos de los gastos de boda, comuniones y bautizos, regalos de joyas, automóviles, etc.).
Por si todo ello fuera poco los magistrados firmantes de la sentencia no creen el testimonio que en su día prestó Rajoy como testigo, en el sentido de que ignoraba la existencia de una contabilidad paralela, la cuenta B, del partido de la que cobraban sobresueldos los destacados miembros del mismo. Dicho con otras palabras, el Tribunal tiene la convicción de que Rajoy mintió.
La descripción de cuanto antecede hubiera bastado - y sobrado - para que en país democrático de verdad - no de boquilla como el nuestro - se hubiera presentado la dimisión en bloque del Gobierno, que no es el caso, toda vez que España es un país que está lejos, por falta de formación y costumbre, de ser una democracia y así nos luce el pelo. Veremos en que acaba esa moción de censura que ha presentado el PSOE para desalojar del poder al Partido Popular.