martes, 14 de agosto de 2018

EL PLÁTANO CANARIO

Desde hace muchos años paso temporadas en Canarias lo que me ha hecho seguir con interés la vida del archipiélago. En ese sentido siempre me han llamado la atención las plataneras, esa rara especie que no es ni arbusto ni árbol. Es un cultivo ese del plátano que está resistiendo -no se sabe durante cuanto tiempo - el progresivo retroceso de la agricultura canaria que ha visto desaparecer cultivos como el tomate, caña de azúcar, tabaco....Hoy la industria del plátano supone un 1% del PIB canario y da ocupación a unas 15.000 personas entre puestos directos e inducidos. 
Se producen del orden de 400 millones de kg. de los que de manera periódica destruyen del orden del 4% para mantener precios. La casi totalidad de las ventas se realizan entre la Península y Baleares, siendo testimoniales y a todas luces insuficientes, las exportaciones al Reino Unido, Suiza y Marruecos, siendo este uno de los grandes problemas que amenazan seriamente la supervivencia de este sector. El otro problema - y este es casi letal -  es la política de subvenciones que mantienen viva de manera artificial la actividad. Fíjense sino en los siguientes datos.
El precio de venta de los agricultores a los mayoristas viene a ser de 0,77 €/kg. El Gobierno canario subvenciona a los agricultores con 0,35 € /kg. y la UE en el 2.017 subvencionó la actividad con 141 millones de euros, que para la producción neta supuso 141/384 = 0,37 €/Kg. de modo que los agricultores (no todos porque son 8.000 los existentes en las islas y la totalidad no están adscritos a centrales cooperativas), percibieron, 0,77 + 0,35 + 0,37 = 1,49 € /kg., de modo que casi el 52% de los ingresos lo fueron a través de subvenciones, situación a todas luces anómala y de dificil mantenimiento, más todavía cuando la UE está en la idea de ir retirando su ayuda. Por si fueron poco lo citado, resulta que hay añadir la actuación agresiva exportadora de los productores de bananas caribeños, con lo cual el futuro del plátano canario ve agravada su crónica debilidad.
De desaparecer por inanición este cultivo, se habrá ido prácticamente al carajo la agricultura canaria, actividad que hasta hace relativamente pocos años era el sustento básico de la población del archipiélago. Ahora es el cada vez más masificado turismo que representa el 37 % de su PIB quien ha tomado el relevo en una muestra de los tiempos que nos está tocando vivir.




No hay comentarios:

Publicar un comentario