Si estamos de acuerdo en que una negociación tiene como objetivo el llegar a acuerdos aceptables para todos los protagonistas de la misma, dificil empeño tiene el actual Presidente del Gobierno para llevar a buen puerto las negociaciones con - necesariamente - todos los que van a intervenir en la que le lleve renovar la presidencia por más que tenga una bien merecida fama de ser un resistente con galones. ERC, Junts, EH Bildu, PNV, BNG, CC y UPN, son los partidos con los que tiene que negociar para obtener el deseado si que le lleve a repetir como Presidente. Mucha tela.
Se dice que una negociación tiene la etiqueta de buen acuerdo cuando las partes intervinientes se levantan de la mesa de negociación ligeramente insatisfechos del resultado de la misma y esto es así ya que si una parte acaba ese proceso muy satisfecho, la otra necesariamente no lo estará tanto, por lo que se puede afirmar que los acuerdos adoptados corren seria peligro de que lleguen a plasmarse.
En los últimos tiempos esa "moderada insatisfacción" a la que hemos hecho referencia, tiene por parte de los que se mueven por el mundo de habla inglesa una expresión que es otra forma de definir una buena negociación. Se trata de la expresion WIN TO WIN, que se puede definir como", la estrategia que tiene
como objetivo conseguir que todas las partes salgan beneficiadas", cuestión que el fondo es, al fin y al cabo, lo mismo que la definicíón anterior, pero en inglés, que viste mucho.
Y eso que parece una forma razonable de llegar a acuerdos, cuando se trata de hacerlo con 7 partidos políticos, de su madre y de su padre, tiene todos los visos de resultar una misión harto dificil por no decir imposible, lo que desembocaría en un nuevo proceso electoral por lo que volveríamos a la casilla de partida.
Y si la campaña que desembocó en el 23J. fue todo un espectáculo, no quiero pensar a que extremos llegariamos en esta reedición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario