Son una asociación española de camareras de pisos que se presentó en Barcelona hace 5 años. Esta asociación fue creada en defensa de los intereses de ese grupo de trabajadoras que en su conjunto venían - y vienen - siendo objeto de innumerables atropellos por una buena parte de los hoteles en los que prestan sus servicios.
A las duras condiciones exigidas en sus puestos de trabajo en orden a la carga del mismo, se unen la externalización de la actividad, los magros salarios y por si fuera poco la temporalidad de los empleos.
Este bravo grupo de mujeres maltratadas (este tipo de empleos no son sino otra forma de maltrato) ha conseguido financiación para poner en marcha una central de reserva de hoteles en la que se recomienda solo aquellos en los que se respeta y cumplen los convenios del sector, las leyes de prevención de riesgos laborales, el que no haya diferenciación de salarios por sexo, que se contrate a personas de colectivos vulnerables y que no se externalice ni subcontatre los servicios esenciales.
No será fácil que esa lista de hoteles sea nutrida como consecuencia de las condiciones citadas, pero si persisten en su empeño y la unidad del grupo no se rompe, finalmente los hoteles, por lo menos parte de ellos, pasarán por el aro que es lo que al final se persigue.
La actuación de ese grupo de trabajadoras es un ejemplo digno de admiración y que pone en valor aquello de que "el que la sigue, lo consigue". Suerte
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