jueves, 14 de mayo de 2020

LA INFORMÁTICA

Como todos los días gallina amarga la cocina, cambiamos de tercio y vamos con el de la informática que si bien ha supuesto toda una revolución en nuestras vidas, también ha supuesto la desaparición de muchos procedimientos que se habían arraigado en nuestro diario quehacer.
Por ejemplo, determinar la posición de un barco en la mar, de un avión en el aire o de un objeto en tierra, se ha convertido en una maniobra al alcance de un niño de 5 años utilizando un teléfono móvil con GPS (Sistema de Posicionamiento Global) puesto en marcha por EEUU, en 1.993, en principio con fines exclusivamente militares, aunque dos años más tarde lo puso a disposición de la comunidad internacional.
Pero como quiera que la precisión de sus datos podía ser variada a voluntad por el titular del mismo, que no es otro que el Departamento de Defensa de ese país, pues varias potencias mundiales han ido poniendo en marcha sucesivamente sus sistemas de localización lanzando una serie de satélites al espacio y así, la desaparecida URSS creó su sistema GLONASS, Europa su GALILEO, China su BEIDOU e India su NAVIC.
Algunas cosas, muchas, se han facilitado notablemente con la puesta en acción de ese invento, pero otras han perdido parte de su encanto, como por ejemplo el de obtener las coordenadas de un barco por medio de, un sextante para tomar la altura del Sol sobre la linea del horizonte, un cronómetro preciso y unas tablas de navegación que permitieran conocer la declinación del astro rey así como la posición diaria del mismo a las 12 UT respecto al meridiano de Greenwich, amén de un block y un lápiz afilado. Ese meridiano de referencia que cada vez que lo veo escrito me recuerda de manera inevitable al que fue Ministro de Industria del Gobierno de España en el último mandato del PP, que acerca de el puso una vez mas al descubierto su profunda ignorancia, ya que pese a ser canario, juraba y perjuraba con repique que el citado meridiano pasaba por sus islas.
A lo dicho, ahora un niño sin saber ni papa, puede leer la posición exacta de un barco en la mar como quien lava, cuestión que para los que hacerlo llevaba una formación y un tiempo tenía su cosilla de la que ahora por comodidad se ven privados. Y que quieren que les diga, resulta que hay inventos un tanto molestos en algunos aspectos.
En las siguientes entregas habrá que seguir hablando del rey de la actualidad, del covi-19, pero también para destensar intercalaré como se hacían las raices cuadradas antes del invento de las máquinas calculadoras, esas con la que mi panadera calcula velozmente a cuanto asciende la cuenta cuando me llevo un periódico que cuesta 1,60€ y un pan de 1,10. (Cuando entro en la tienda y no está tras el mostrador suelo esconderle la máquina y ....)

No hay comentarios:

Publicar un comentario