jueves, 2 de julio de 2015

LADRONES DE HORAS

El autor, en su mayor parte, del trabajo del título es Paco Muro, Presidente de Otto Walter España S.A, que es una empresa ubicada en Las Rozas (Madrid) y dedicada a la Formación Profesional. 
El objeto del trabajo tiene su razón en conseguir una correcta utilización del tiempo, ese bien tan escaso al que tan poco valor concedemos y tanto menos cuando menor es la edad de las personas, hasta el punto de que casi se podría establecer una rama de parábola, en cuyos extremos estarían por un lado las personas de poca edad y en el otro las de edad que cuando más avanzada, más arriba estarían situados en la curva, si bien como todas las reglas- menos las de tres - tiene sus excepciones, por ejemplo la de los jubilados que ven pasar el tiempo como las vacas los trenes. Abundan este tipo de personas que a la pregunta ¿ que tal ?, contestan "pues aquí, matando el tiempo". Lamentable pero cierto.
Ese es un preámbulo de mi cosecha porque Muro se centra de manera exclusiva en el aprovechamiento del tiempo bajo el punto de vista laboral, lo que produce un doble efecto. Por un lado mejora tu  productividad durante el tiempo de estancia en tu centro de trabajo y por otro ejerce una labor terapéutica toda vez que rebaja de manera sensible las tensiones de tu sistema nervioso.
Vamos pues a ello después de esta entrada.

-Hay que tener claro que es lo que quieres hacer, ya que si quieres hacerlo todo tendrás la sensación  de que no puedes hacer nada. Así un elefante se puede comer entero, si, pero a cachitos.
-El no saber decir no a una demanda, ya que es mejor decir no y llegar siempre donde dices, que decir  si y llegar solo cuando puedes. Esa forma de hacer, paradójicamente mejora tu prestigio profesional.
-La incapacidad de delegar no debe extrañarte que una tarea determinada siempre tengas que hacerla tu. Enseña, confía y delega. 
- Ejecutar una labor con un nivel de perfección innecesaria por no saber simplificar, es uno de los  mayores derroches de tiempo que se produce, ya que con ese nivel de acabado nadie te lo ha pedido y para mas inri nadie te lo agradecerá.
- La ejecución de una tarea que no haya sido planificada y escrita, dificulta enormemente la distinción  entre lo urgente y lo importante. Planificar, ejecutar y evaluar el resultado después de acabada la tarea, es el triángulo de acciones que evitará un derroche de tiempo y malos humores.
- Una mesa invadida de papeles de manera permanente es sinónimo de un profesional poco  organizado y si además los papeles están en un orden patético, pues...
- Los asaltantes de tu tiempo a través del teléfono, tanto en forma de conversación como de  mensajes o whatsAap o de correos electrónicos a través de internet, o los que irrumpen tu puesto de trabajo sin una cita previa, además de interrumpir lo que estabas haciendo con la consiguiente  pérdida de concentración, están utilizando una parte valiosa de tu tiempo no prevista para esas funciones. Una buena defensa de tu sistema organizativo es atender la apertura de todo tipo de  mensajería cada un tiempo que fijes. Dos, tres horas etc. Y a los que se sientan frente a ti a ojímetro  sin haber avisado, no les des carrete y lárgalos cuanto antes.
-Una forma siniestra de perder el tiempo, hacer disminuir la capacidad de atención y de aportaciones  es alargar las reuniones hasta el aburrimiento por no haber fijado previamente la duración de la misma o lo que es lo mismo, su hora de finalización.


(Continuará)

No hay comentarios:

Publicar un comentario