14 DE ABRIL

 

No sería de recibo dejar pasar esta fecha histórica sin hacer alguna referencia a ella. 14 de abril de 1.931. Se instaura en ese día la II República en España, se iza en el balcón del Ayuntamiento de Eibar (la primera en España) la tricolor y Alfonso XIII sale al destierro, hacia el retiro dorado de Italia donde fallece 2 años después. Esta segunda edición de la República dejó de existir el 1 de abril de 1.939 tras la victoria del golpe de Estado de Franco que lo encumbró a una dictadura que duró 39 años.

 

Hay que recordar que el concepto de república como sistema de gobierno como tal, ya mereció la atención de personajes griegos como Aristóteles y de eso hace ya 2.400 años. Sin embargo esa idea quedó ahí, congelada, hasta que reapareció en Roma 5 siglos aC.

El término de república viene de la expresión "rex pública" que quiere decir "cosa de las personas" o "propiedad pública" en clara oposición a "propiedad del rey" que es lo que imperaba.

Pero volviendo a Roma, una cosa son las ideas y otra es la forma de implementarlas ya que en la ahora capital italiana la ciudadanía se otorgaba a pocas personas y todas ellas poderosas, claro, de modo que de hecho la "rex publica" se convertía en realidad en "la propiedad de unas pocas personas elegidas". 

Tuvo que ser ya en la edad media cuando esta forma de entender el gobierno de los pueblos empezó otra vez a resurgir, por lo menos filosóficamente, como reacción de rechazo ante el sistema de poder que se derivaba de la aristocracia y de la monarquía. 

Fue en EEUU el primer país moderno, tras conseguir su independencia del dominio que venía ejerciendo en él el Reino Unido, cuando se implantó el sistema que nos ocupa. 

Volviendo al sistema monárquico que imperaba mayoritariamente hasta esa fecha, las monarquías eran de dos clases. Una, las llamadas monarquías absolutas eran - y algunas lo siguen siendo como veremos - en las que todos los poderes del estado, el legislativo, el ejecutivo y el judicial, se concentraban  en manos de un rey.

Hoy las que de este tipo permanecen son casi todas árabes como Arabia Saudí, Qatar, Brunéi, Emiratos Árabes Unidos, Suazilandia, pequeño país con la misma población que Bizkaia, ex colonia inglesa (como no), situada en África entre Mozambique y África del Sur y como cosa curiosa muy poco conocida, el Vaticano, la Ciudad del Vaticano, capital del mundo católico.

Puede parecer que incluir a este pequeño país independiente dentro de Italia, con una población de 850 habitantes y de una superficie de 0,44 Km2, suene a error, pero no lo es, ya que el Papa conserva, tiene, a su mando los tres poderes del estado antes citados y eso convierte a ese atípico enclave en una monarquía absoluta, convirtiéndola de facto en la única que de ese tipo existe en Europa.

Luego quedan las otras monarquías, las más "civilizadas"  que son las llamadas monarquías parlamentarias en las que "el rey, reina pero no gobierna" ya que en ellas son los parlamentos de las mismas la que asumen el poder de los tres pilares del mismo y estas son por orden alfabético las siguientes: 

Australia, Bélgica, Camboya, Canadá, Dinamarca, España, Jamaica, Japón, Luxemburgo, Malasia, Marruecos, Mónaco, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Reino Unido y Suecia. Curiosamente se pueden agrupar mayormente estas naciones en 4 que fueron colonias del Reino Unido y que siguen perteneciendo a la Commonwealth y 3 nórdicas. De modo que sorprendentemente resulta que Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Jamaica, son reinos con una reina común : Isabel II de Inglaterra. 

De modo que entre las absolutas y parlamentarias son 23 las monarquías que siguen existiendo en el mundo de entre un total de los 194 países censados o sea que representan en números el 12 % de los mismos.

Vistas las funciones que ejercen los reyes en las monarquías parlamentarias, que no son otra cosa que meramente simbólicas, representativas, cuesta entender que bajo el punto de vista funcional siga habiendo personas que se declaren monárquicas y solo se medio entiende su postura, bien por tradición o por que su ADN así lo marca, pero esa idea no aguanta bajo el punto de vista intelectual ni un asalto, porque admitir que por linea sucesoria, por pura tradición, llegue a ese puesto una persona que sea incapaz de hacer la O con un canuto y que permanezca haciendo el canelo hasta el fin de sus días como Jefe del Estado (incluso si es honrado) clama cuanto menos al cielo. 

De modo que tras lo dicho reafirmo mis ideas anti monárquicas por pura asepsia mental, con un ¡ Viva la República !. Salud.  Cambio y corto.