Entrega 23ª.  El Universo

Las Nebulosas

El espacio existente entre las estrellas está ocupado por gases, en su mayoría compuestos de H, He
y polvo cósmico. Tienen una enorme importancia ya  que se piensa que en ellas nacen por condensa-
ción de los citados elementos las nuevas estrellas e incluso su origen puede estar también en los restos de  estrellas ya desaparecidas puesto que estas acaban  como polvo cósmico. Se clasifican de acuerdo con  su luminosidad y así las de EMISIÓN (Fig. 12), son muy brillantes como consecuencia de que cerca de ellas se encuentre alguna estrella o estrellas muy calientes que ionizan el H de la nebulosa que como consecuencia, emite luz propia. Es famosa la de la constelación de ORIÓN, la M42, observable a simple vista, justo por debajo de las Tres Marías.

OSCURAS, así llamadas debido a que no emiten luz porque las estrellas situadas en su cercanía no
están colocadas adecuadamente. (Fig.13). Una  nebulosa de este tipo es la llamada “Cabeza de caballo”, (Fig.14) localizable también en ORIÓN.

De REFLEXIÓN porque reflejan la luz que reciben de una estrella. (Fig. 15) .

PLANETARIAS, las de este tipo están compuestas de una nube gaseosa muy tenue que rodea a una
estrella que se ha desprendido de su capa gaseosa.