Entrega 4ª O Caminho

El camino ejerció una notable influencia en la vida social y económica de los reinos cristianos situados sobre todo en el norte de la Península, donde fue más acusada, ya que los profesionales procedentes de Europa vinieron tras los clientes que se movían a lo largo del Camino - en eso pese al tiempo transcurrido las cosas no han cambiado - y fueron estableciéndose al amparo de iglesias y fortalezas cuando las había y así poco a poco fueron creándose los burgos a lo largo de la ruta jacobea.
En ese conjunto de profesionales se encontraban, tenderos, canteros, guarnicioneros, carpinteros, maestros de obras, albañiles y un largo etcétera, que en base a sus conocimientos construyeron iglesias, albergues, hospitales, puentes, aportaron estilos arquitectónicos ...Bajo la afluencia de los peregrinos se fueron potenciando o incluso creando, poblaciones como Jaca, Puente la Reina, Santo Domingo de la Calzada, Castrojeriz....Se fue convirtiendo además esta vía  en un auténtico crisol de la cultura de la Edad media, como consecuencia de la corriente humana que procedente de Europa o bien circulaba o se instalaba a lo largo del camino. De esta manera 
en el período comprendido entre los siglos XI y XIII, se implantaron soluciones arquitectónicas procedentes del continente, como se pueden ver en Jaca, Frómista, Villalcazar de Sirga, León, Santiago y tantas otras. Dentro de esa corriente novedosa cabe destacar la entrada del arte gótico, siendo unos claros exponentes de la misma la colegiata de Roncesvalles y las catedrales de Burgos y León. La corriente artística, por otra parte,no solo procedía de Europa ya que el que se introdujo llegaba desde el sur de la Península.
Sin embargo en la historia de la ruta no fueron todos los días de crecimiento, de vino y rosas, ya que en los últimos siglos de la Edad media sufrió un evidente retroceso en su evolución.
La Guerra de los Cien Años, la peste negra que acabó con la tercera parte de la población europea, las guerras en que Europa se vio envuelta, la división de la cristiandad por el Cisma, el desarrollo del comercio marítimo, el desplazamiento del centro de gravedad económico de la corona de Castilla hacia el sur y el incremento de la delincuencia, fueron todas ellas cuestiones que prácticamente dejaron muy disminuida  la vida en el Camino y constreñida la que quedaba a  la función religiosa.
 Todavía, además de los descritos, sufriría el Camino en el siglo XVI un serio revés -que lo hicieron caer a las horas más bajas de su historia - como lo fueron más guerras en Europa y la aparición en escena del protestantismo. Sin embargo un siglo después fue recuperándose y así por ejemplo, el arte barroco que se inició en Europa en el siglo XVII, entró en España por esa vía dejando importantes muestras del mismo. Pero en ese subir y bajar en la actividad del Camino a lo largo de su historia, parecía que le había llegado su fin en el XIX porque una serie de circunstancias hicieron su aparición, tales como el liberalismo, el progreso industrial y científico, ya que no casaban con una tradición que tenía su origen, sus esencias, en el medievo.  
Sin embargo la Iglesia no podía dejar morir ese fenómeno cultural-socio económico y religioso y a tal fin el Papa León XIII, tal como hemos apuntado en la entrega anterior, acudió en auxilio del mismo, acción que hoy 130 años después, aún perdura.