PROYECTO HIRIKO

Doña Arantza Tapia, Consejera de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno Vasco, no deja de sorprenderme con el contenido de varias de sus declaraciones, la última de ellas cuando manifiesta ante el fallido proyecto del coche vasco eléctrico, desarrollado bajo el nombre de HIRIKO que las subvenciones que concedió el GV. para el desarrollo del mismo fueron bien utilizadas "aunque otra cosa es que como consecuencia de este proyecto de investigación no se haya conseguido la transferencia a mercado y la puesta en marcha del vehículo como tal. La transferencia a mercado no ha sido posible, es ahí donde hemos encontrado el proyecto fallido".

Pero Consejera ¿cual era el objetivo finalista del proyecto?. ¿Invertir un montón de millones de euros en un proyecto estilo fin de carrera o como todos los proyectos que no tengan la vitola de ciencia pura, situarlo en el mercado para amortizar la inversión efectuada en el mismo, para lo cual hay que ganar dinero?. Para atajar esa desmemoria atávica de nuestros políticos en cada proyecto que el GV y otros subvencionan, habría que colocar a la manera de frontispicio un rótulo en letras imperecederas que dijera claramente de que tipo de proyecto se trataba, si de ciencia pura, si de investigación aplicada con la idea de situar un producto novedoso y competitivo en el mercado o a título de simple divertimento o a tipo proyecto fin de carrera, acerca de los cuales, por cierto, no agradeceremos nunca lo suficiente el hecho de que no se tiene noticia de que ninguno se haya llevado a la práctica. Ocasiones como esta del proyecto HIRIKO me reafirman en la idea de que a nuestros dirigentes el concepto de "cuenta de explotación", les es absolutamente ajeno, novedoso, solo al alcance de algunos iniciados.