LA SALIDA DE LOS CRACKS
El tiempo va poniendo a cada uno en
su sitio. El rapapolvos de Bielsa ante la falta de compromiso de
nuestros dos cracks en las dos últimas finales perdidas, pone de
manifiesto que ambos tenían ya muy claro que su estancia en el Athletic
estaba a punto de acabar y claro, en esas condiciones allí había mucho
que perder y poco que ganar bajo el punto de vista personal.Por otra
parte al delantero centro le queda la friolera de 11 meses de presencia
en el Club- toda vez que con ese horizonte nadie vendrá a llevárselo
por 36 millones de euros - meses que se le van a hacer por otra parte
eternos. Y si el compromiso en las finales fue el citado, no me imagino
lo que cuidaría su físico en los 11 meses que le quedan hasta junio del
próximo año en el supuesto que formara parte de las alineaciones. En
otro orden de cosas, en las negociaciones hay momentos en los que todo
parece ir viento en popa y otros en los que se tiene el viento de cara y
en este momento, confirmada la salida de Martinez, el viento sopla
huracanado contra los intereses del delantero.En mi opinión ha jugado y
ha perdido, pero perdido de manera irreversible - pese al resquicio que
Urrutia deja abierto - como consecuencia de la gran cantidad de agua que
ha pasado bajo los puentes, porque corre el enorme riesgo de permanecer
toda una temporada en el banquillo, con lo que de negativo tiene eso
para un deportista. Esa opción sería bajo mi punto de vista la opción
más inteligente por parte del Athletic, puesto que si nos hemos de
acostumbrar a no tenerlo en nuestras filas, cuanto antes nos pongamos a
ello tanto mejor. Si a eso le añadimos el escaso compromiso esperable de
él y la crispación que su presencia provocaría en San Mamés, a lo
dicho. Al banquillo toda la temporada. Serviría además tal opción como
aviso añadido para navegantes deportivos, barcos de altura y navegación
de cabotaje.
R.Hidalgo Segurola
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